La solución adoptada consistió en la instalación de cinco tramos de barrera dinámica RB9000 diseñadas para proteger tanto la carretera como las embocaduras de los túneles frente a la caída de bloques. Estas barreras cuentan con una altura de 8 metros y una capacidad de absorción de energía de hasta 9000 kJ, certificada por el marcado CE para validar sus prestaciones. Se instalaron en total 430 metros lineales de protección, distribuidos en: tramo 1 con 90 m, tramo 2 con 80 m, tramo 3 con 110 m, tramo 4 con 80 m y tramo 5 con 70 m.

La definición del replanteo de las barreras presentó una alta complejidad técnica, ya que fue necesario solapar adecuadamente los tramos para garantizar una cobertura continua de toda la zona de influencia, sin interferir con una línea eléctrica de media tensión ya existente. Esta barrera destaca por su fácil instalación atribuido a la facilidad del despliegue de la red de anillos en cortina, la reducción en número de perforaciones en postes que otras barreras del mercado y peldaños laterales para mayor seguridad en su montaje. Además, los elementos de la barrera son transportables por helicóptero, ventaja clave por restricciones de la línea media tensión.